Atención: Drama lésbico aterriza en Canadá. Sí, aunque suene a sangriento y lacrimógeno suceso, en realidad es motivo de alegría. El Festival Internacional de Cine de Toronto fue el elegido para presentar Disobedience, el nuevo film del director argentino, Sebastián Leilo. ¿Lo mejor? Rachel McAdams y Rachel Weisz ¡juntas!
Por: Samara Martinez
Periodista y escritora| @Sam_Prietova
Vamos al grano: Lejos de la delicadeza con la que tratan el sexo lésbico muchos directores, Leilo nos regala una película muy gráfica. Tendremos que esperar a ver si el contenido de sus planos se puede comparar a los de ‘La vida de Adele’, pero lo que sí es cierto es que los medios que han tenido la oportunidad de verla la catalogan de apasionada con una escena entre las Rachels realmente impetuosa.
Vulture, el medio de cultura del New York Magazine, hizo una descripción detallada de la escena que convertirá esta película en una de nuestras favoritas (seguro).
La escena
Las protagonistas se muestran incapaces de estar separadas, pero a su vez, tampoco de estar juntas en público. Finalmente, es en un hotel donde el reencuentro de las dos mujeres desata la escena. Ronit (Rachel Weisz) y Esti (Rachel McAdams) beben la una de la otra, sin obstáculos, con pasión. Los gemidos de Esti son arrancados de su boca mientras Ronit la desviste con los dientes. Investigan cada rincón con sus lenguas hasta buscar bajo su ropa interior. Intensas. Pero el momento cumbre de la escena es cuando Rachel Weisz se sienta a horcajadas sobre Rachel McAdams y escupe en su boca. El personaje de McAdams pide más”.
Disobedience, del libro a la película
Disobedience está basada en el libro homónimo de Naomi Alderman, donde nos narra la historia de Ronit (Rachel Weisz) considerada la oveja negra de su familia judío-ortodoxa. Decide partir de Londres para trabajar en Nueva York como fotógrafa y además vivir abiertamente su sexualidad. Sin embargo, la muerte de su padre, un importante rabino de su comunidad, le obliga a regresar. Es entonces cuando se encontrará con una vieja amiga de la infancia: Esti , quien vive aún en el mismo barrio, y que además ahora está casada con Dovid (Alessandro Nivola), quien apunta a ser el heredero de la comunidad del recién fallecido rabino. Este encuentro desatará la pasión entre las chicas. Esti deberá elegir entre dar rienda suelta a sus deseos o continuar casada y fiel.
La película, distribuida por Curzon Artificial Eye, verá la luz en 2018.