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Mamás2: Todo sobre el método ROPA

19 de mayo de 2023 | Maternidad

El Método ROPA, o Recepción de Óvulos de la Pareja, puede ser la técnica de reproducción asistida que más se ajuste a las expectativas de las madres de hacer llegar un nuevo miembro a la familia

Estáis pensando en formar una familia y os habéis encontrado un sinfín de métodos para poder hacerlo. Elegir el más adecuado pasa por conocerlos todos en profundidad, es por eso que hoy hablamos del más novedoso y completo de todos los métodos para formar una familia con dos madres: el método ROPA. La opción más adecuada para que ambas madres participen de manera física en la concepción del futuro bebé. 

¡Vamos a resolver todas vuestras dudas!

¿Qué es el método ROPA?

El Método ROPA, o Recepción de Óvulos de la Pareja, es una técnica de reproducción asistida en la que ambas mujeres participan activamente en el proceso de fecundación y gestación.

Este método es algo más laborioso que otras técnicas de reproducción asistida, pero también es el más completo en cuanto a la actividad de las dos futuras madres se refiere. Con el método ROPA se requiere la participación de ambas para gestar al futuro bebé: una que aporte su óvulo y otra que reciba el embrión para su gestación.

Te lo explicamos paso a paso para que te quede clarinete:

Método ROPA paso por paso:

Evaluación médica:

Lo primero es una evaluación médica a ambas mujeres para determinar si son candidatas adecuadas para el proceso. Durante esta evaluación, se llevarán a cabo exámenes médicos, análisis de sangre y pruebas genéticas para asegurarse de que todo esté en orden.

Tratamiento hormonal:

Si todo está bien en la evaluación, se iniciará la estimulación ovárica o, lo que es lo mismo, el tratamiento hormonal a la que aportará el óvulo para estimular la producción de múltiples óvulos. La madre que aportará el óvulo se administrará inyecciones diarias de hormonas durante un período de alrededor de 10 a 14 días. Durante este tiempo, se realizarán controles médicos frecuentes para asegurarse de que la estimulación hormonal esté funcionando correctamente. Este proceso permite conseguir varios óvulos, que se podrán utilizar a lo largo de varios ciclos, sin necesidad de repetir la estimulación.

Una vez los óvulos han alcanzado el número y el tamaño adecuado, se administra una dosis de la hormona hCG para inducir su maduración y, 36 horas después, se programa la punción.

Extracción de óvulos:

Una vez que los óvulos estén listos, se extraen mediante una intervención quirúrgica llamada punción ovárica. Este procedimiento se realiza bajo sedación y dura aproximadamente 20 a 30 minutos. Durante la punción ovárica, se utiliza un dispositivo de aspiración para extraer los óvulos de los ovarios de la madre que aporta el óvulo.

Fecundación en el laboratorio:

Después de la extracción de óvulos, los óvulos son llevados al laboratorio donde se fecundan mediante fecundación in vitro con el esperma de un donante. Hay dos técnicas para fecundar el óvulo: la ICSI consiste en inyectar un espermatozoide en cada uno de los óvulos; o de manera natural, colocando en una placa de cultivo los óvulos y la muestra de semen para que se produzca la fecundación.

Con los óvulos fecundados se obtienen embriones. Estos embriones se cultivan en el laboratorio entre 3 y 5 días. Embriólogos expertos hacen un seguimiento de su desarrollo para clasificarlos en función de su morfología y capacidad de división, para así determinar cuál es el mejor embrión.

Preparación endometrial:

La madre gestante va a recibir un embrión, por eso es importante que su endometrio esté adecuadamente preparado. Este proceso se conoce como preparación endometrial y se realiza mediante la administración de un tratamiento hormonal que incluye estrógenos y progesterona.

El objetivo de la preparación endometrial es asegurarse de que el endometrio tenga un grosor adecuado y esté en las mejores condiciones para la implantación del embrión.

Transferencia de embriones:

Finalmente, se transfieren los embriones resultantes al útero de la madre gestante, quien llevará a término el embarazo. Esta transferencia se realiza mediante un procedimiento de inserción de catéter no invasivo y es relativamente indolora. Tras este proceso y 11 días después de la transferencia se realiza la prueba de embarazo en sangre. Si el resultado es positivo, a los 20 días se realiza una ecografía de control, con la que la paciente recibe el alta.

¿Por qué elegir el Método ROPA? 

Este método de reproducción asistida es una forma de compartir la experiencia del embarazo y la maternidad entre ambas mujeres de la pareja. La Recepción de Óvulos de la Pareja permite a la madre biológica estar más involucrada en el proceso de concepción, algo que puede ser ¡muy emocionante! 

Por otro lado, la madre gestante, tiene la oportunidad de recibir material genético de su pareja, algo que solo ocurría (hasta ahora) en la concepción entre parejas heterosexuales cuando el esperma de la pareja estaba implicado.

Otro factor importante a tener en cuenta es la relación entre el futuro bebé con sus madres. Desde el inicio del proceso, el futuro bebé también tiene la oportunidad de  establecer lazos con ambas madres, ya sea por la parte genética o por la gestacional. Ambas madres forman parte de su desarrollo desde el principio.

Otras ventajas del método ROPA

Un método de éxito:

En el método ROPA usa la técnica de Fecundación in Vitro que tiene una tasa de éxito del  92% tras tres intentos, muy superior a la de la Inseminación Artificial con un 46%. 

Epigenética, algo a tener en cuenta:

En los últimos avances en el campo de la epigenética, se ha descubierto que la madre gestante juega un papel importante en el desarrollo del embrión. Si bien es cierto que el bebé heredará características genéticas tanto del ovocito de la pareja como del espermatozoide del donante, hay que tener en cuenta que el embrión se desarrolla en el cuerpo de la madre gestante y que los nutrientes que ingiere se ponen a disposición del crecimiento y desarrollo del bebé, influyendo activamente en su desarrollo y en su expresión genética.

La familia crece:

Tanto si el primer intento con el método ROPA ha sido fructífero como si no (y vais a intentarlo de nuevo) el resto de embriones de buena calidad se conservan para su uso futuro gracias a la técnica de la vitrificación.

Para la vitrificar los embriones, estos se tratan con una serie de medios protectores que evitan daños en el proceso de enfriamiento. Una vez terminado el proceso, se colocan en unos pequeños soportes y se sumergen en nitrógeno líquido, a una temperatura de -196°C. Los soportes con los óvulos vitrificados se almacenan en unos tanques específicos que mantienen constantes esas bajísimas temperaturas y cuentan con un doble sistema de alarma para garantizar que la temperatura permanece en el rango óptimo en todo momento.

Gracias a la vitrificación, los embriones sobrantes se pueden utilizar en un ciclo posterior sin necesidad de una nueva estimulación. Si la transferencia acaba logrando un embarazo, pueden utilizarse para intentar tener otro bebé en un futuro. ¡Todo ventajas!

El doctor Antonio Requena, Director Médico de IVI, explica todo el proceso del método ROPA.

Formar una familia es un paso importante, tanto que la elección del método mediante el cuál llevarlo a cabo es una de las decisiones más importantes. El método ROPA os permitirá formar parte activamente del proceso, tener una mayor tasa de éxito en busca del embarazo, estrechar lazos con vuestro futuro bebé desde el primer momento y aventuraros conjuntamente en la maternidad durante los primeros pasos de ésta. 

¿Estáis preparadas? Podéis empezar pidiendo cita aquí.

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