Una de cal y otra de arena. Nos han matado en numerosas ocasiones en unos dramones inaguantables cargados de dolor y desespero. Es así, tenemos fama de intensas. Con el reverso de la mano pegado a la frente y suspiros que podrían mover molinos nos quejamos en cada esquina de nuestra suerte. No tiene nada que ver el ver reflejado en la pantalla un sistema heteronormativo; no, que va. Casi ninguna protagonista mujer y lesbiana ha sido feliz en las series y en las películas hechas hasta ahora, PERO tenemos una baza que no se nos ha podido negar porque todo el mundo sabe que detrás de una lesbiana fuerte y decidida, hay un trauma (es ironía, no te alarmes) y, consecuencia de ello, una villana malévola.
Lucy Diamond
¿Qué esperabas con ese nombre? Lucy Diamond fue encarnada por Jordana Brewster en la película D.E.B.S. espías en acción. Entre tú y yo, una película simplona para echar la tarde, pero que sorprendió con la aparición de, no solo un personaje lésbico, sino dos, pues la villana, Lucy, seduce a la protagonista.
Franky Doyle
La chunga de la cárcel en la serie australiana Wentworth. Tatuajes, morena, con mirada profunda. La tía por la que te cambiabas de acera si te la encuentras por la calle -literal, figuradamente si eres hetero-. Una tía peligrosa, vamos. A su vez nos recuerda algo a Alex Vause por el rollito de “aquí estoy yo” que lleva. Para las fans de OITNB sentimos deciros que Wentworth se produjo antes.
Saray Vargas
Otra en prisión y es que nos cazan antes que al cojo. Deberían cambiar el refrán. En el fondo, Saray, es un trozo de pan, pero ha repartido tortas como eso, como panes. En su caso sí que hay dramas, relaciones destrozadas e incluso un hombre con el que se tiene que casar por obligación, pero todo esto lo combate con cara de malas pulgas y juntándose con la reina y señora de la prisión de Cruz del Sur.
Pauline Parker y Juliet Hulme
Personajes interpretados por Melanie Lynskey y Kate Winslet en su debut como actrices en la película Criaturas Celestiales, un film basado en hechos reales. El término villana en este caso se difumina un poco con el de psicópatas. A lo largo del film las protagonistas se ven ensimismadas por un mundo imaginario donde la realidad y la ficción se van confundiendo. Se podría decir que se juega la baza de la obsesión y la esquizofrenia para finalmente convertirse en las villanas de la película habiendo jugado el papel de víctimas desde el principio. El film no lo aconsejo para una cita romántica, la verdad.
Jenny Schecter
Puñetera donde las haya y víctima final de la reina entre las series lésbicas, The L Word. Pese que era fácil que cualquier antagonista de esta serie fuese lesbiana porque abundan, cabe destacar a Jenny por su arco en el argumento. La vimos como una oruga heterosexual combirtiéndose en una crisálida homosexual para emerger como una gran mariposa lesbiana y conflictiva. Lo mires como o mires, si había una villana en esta serie, era ella.
