No dudamos que harás todo lo que hay que hacer para poner a tu chica a tono. Si es así y, al margen de todos los tocamientos habidos y por haber, decides bajar a la fuente del amor, el manantial del sexo, la batcueva de la heroína de tus sueños, queremos que sepas que ambas saldréis beneficiadas de este encuentro de pasión desatada. Ella, claro está, porque disfrutará de tus más exquisitas artes amatorias. Tú, aunque no lo creas, estarás reforzando tu sistema inmunitario. ¿Qué más se puede pedir?
Resulta que en nuestro templo del amor se esconden los lactobacilos, unas bacterias muy simpáticas que ayudan a que nuestra flora vaginal se encuentre en perfectas condiciones. Frenan el crecimiento de bacterias patógenas y hongos, que son las causantes de las vaginosis bacterianas y candidiasis vaginales.  Además de inhiben el crecimiento de microorganismos patógenos, metabolizan la glucosa y producen ácido láctico, el cual mantiene bajo ácido el pH vaginal.

Pero esa no es la única función de los lactobacilos y es que sus propiedades pueden tener un efecto muy positivo para la salud, en general, como promover el equilibrio de la flora intestinal, disminuir la inflamación y ayudar al sistema inmunitario ya que se adhieren a las paredes del intestino para combatir las bacterias atacantes. Vamos, que indispensables en la dieta de cualquiera. Y sí, puedes encontrarlos en el yogur, en la crema agria, en el chucrut, en las microalgas, en el chocolate negro y en el miso, pero nada mejor como tu chica, ¿no? ¿Acaso hay una excusa mejor?